Sentimiento de culpa en la crianza

Estamos “condenadas a ser libres”, a tomar decisiones y por lo tanto, a ser responsables de nuestras decisiones. El filósofo Jean Paul Sartre nos presenta esta condición del ser humano llena de angustia. Pero si alguien conoce bien el sentimiento de culpabilidad, ésas somos las madres.

 

Desde incluso antes de que nazcan los niños estamos “condenadas” a tomar decisiones y lo peor es que las consecuencias no las sufriremos nosotras, sino los seres que más queremos que son ajenos a nuestras decisiones. La alimentación en el embarazo, el tipo de parto, la lactancia materna o artificial, el colecho… Demasiadas decisiones y a veces poca información, o mejor dicho, aunque haya mucha no nos llega la correcta y cuando nos enteramos de lo que había que haber hecho, es casi inevitable sentirse mal.

Para Sartre el sentimiento de angustia nace cuando nos damos cuenta de que todo lo que sucede es consecuencia de nuestras propias decisiones y de que estamos solas frente a las decisiones. En un mundo cada vez más individualista y en el que estamos más alejadas de nuestra tribu, es habitual sentirnos solas y sufrir por la carga de nuestras decisiones. Además, somos mayoritariamente las mujeres las que asumimos el peso de las decisiones por vivir en una sociedad patriarcal.

El hecho de saber que los hijos dependen absolutamente de nosotras, el primer referente del niño, y de que los primeros años son los más importantes para su desarrollo, no hacen más que agravar este sentimiento de angustia. Además, como las consecuencias de muchas de nuestras decisiones sólo se pueden observar a medio o largo plazo, constantemente las cuestionamos. ¿Quién no se ha angustiado por los malditos percentiles, porque su hijo o su hija no coge suficiente peso?, ¿o quién no se ha angustiado por la vuelta al trabajo y la dificultad de seguir con la lactancia materna?, ¿o porque las grietas y la mastitis le impiden disfrutar de la lactancia materna y no sabe qué hacer porque conoce de sobra sus beneficios?, o porque su trabajo le dificulta la conciliación y tiene miedo a dejar un trabajo estable?

No obstante, la libertad no es total como diría Sartre, ni mucho menos, o al menos, en mi opinión. Estamos condicionadas por el tipo de crianza que hemos recibido, por la información que recibimos, por nuestra tribu… Y por lo tanto, aunque no podemos negar la responsabilidad que tenemos, no es, como diría Sartre, absoluta. Así mismo, siendo nuestro principal motor la buena voluntad, no nos deberíamos sentir culpables, porque la culpa no conduce a nada y porque como seres imperfectos que somos, es imposible acertar siempre. Por lo tanto, aprendamos a aceptarnos a nosotras mismas y a nuestros errores.

 

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alaia saenz

Alaia Saenz Orbe

Alaia Saenz Orbe

Soy Alaia Saenz, licenciada en filosofía por la Universidad de Deusto y profesora en educación secundaria. Pero sobre todo, soy madre de dos hijas y estoy preocupada por su desarrollo personal.

El hecho de ser madre ha cambiado mi foco de interés y por eso analizo desde la perspectiva filosófica temas relacionados con la crianza, basándome en los grandes clásicos de la historia.



 

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